La Sheela-na-Gig y el culto a los poderes generativos en el cristianismo celta

El culto a los poderes generativos que impregnaba la antigua religión celta (y precelta) siguió en boga en Irlanda incluso después de la llegada del cristianismo, hasta el punto de que algunos estudiosos hablan de un "cristianismo celta" que, bajo el velo de la nueva culto, habría mantenido intactas las antiguas doctrinas sagradas: una de las pistas más significativas en este sentido es la representación de la Sheela-na-Gig primero en yacimientos megalíticos y pozos sagrados y, más tarde, en las propias iglesias cristianas.