Sobre el Gigante "blanco como la nieve" que se destaca en el horizonte al final de Gordon Pym de EA Poe

La desesperación existencial típicamente romántica de Poe surge precisamente de este contraste: querer experimentar el infinito a través de lo finito y lo absoluto a través de lo relativo; queriendo llamar a las puertas del misterio y acceder al secreto de la existencia, sin renunciar al papel del investigador racional y del caminante que no cree que existan otros caminos hacia la verdad, fuera de los reconocibles por la razón pero que, sin embargo, advierte y presiente que hay algo más, tal vez un Dios Desconocido, para acercarse a lo que se necesitarían otras herramientas y otras actitudes mentales.